LIBRANOS DEL MAL

 

Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal: porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén. Mateo 6:13

El Señor Jesús enseñando a sus discípulos sobre como deben hacer las cosas, muy en especial enseñandoles que no se debe hacer las cosas para ser vistos de los hombres más para la gloria y honra de Dios, les dice sobre la oración: “Vosotros pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. 11 Danos hoy nuestro pan cotidiano. 12 Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos á nuestros deudores. 13 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal: porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos.”

Quisiera que meditemos unos momentos sobre esta parte de “mas libranos del mal”.

Dios nos he prometido en todo momento de estar con nosotros para ayudarnos, guiarnos, fortalecernos y darnos la victoria.

Isaías 43:2: “Cuando pasares por las aguas, yo seré contigo; y por los ríos, no te anegarán. Cuando pasares por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti.”

Salmo 23: 4: “Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno; porque tú estarás conmigo: Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.”

Isaías 41:10: “No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”

En Galatas 1: 4 tenemos la promesa de ser librados de este siglo malo. “El cual se dió á sí mismo por nuestros pecados para librarnos de este presente siglo malo, conforme á la voluntad de Dios y Padre nuestro;”

Dios es omniciente. El conoce todas las cosas. El conoce mi levantarme y mi sentarme. “Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme, Has entendido desde lejos mis pensamientos.” Salmo 139:2

A veces nos suceden cosas que a nosotros nos parecen negativas. Cosas que nos estorban en nuestro diario caminar.

Mas, ¿No hemos de detenernos a meditar si lo que ha ocirrido fue porque el Señor ha intervenido en nuestras vidas para librarnos del mal.

Un ejemplo: Te levantas por la mañana. Tienes prisa para llegar al trabajo. En el auto conduciendo para llegar tienes un pinchazo.

Nuestra primera reacción es de completo enojo. Ahora si que vamos a llegar tarde al trabajo. Con un tiro al volante parqueamos el coche para cambiar la rueda. En todo el proceso que quizas nos toma 20 0 30 minutos estamos reclamando. Llegamos al trabajo furiosos, el jefe nos reclama y contestamos bruscamente y todo nuestro día lo pasamos con un mal genio.

Cuando regresamos a casa después de un largo día de trabajo, todo nos molesta. Los niños jugando nos irritan, la esposa que cariñosamente nos atiende la tratamos friamente ect. Y así culmina el día.

No nos hubiera sido mejor hacer lo que la palabra de Dios nos aconseja: Dad gracias en todo; porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:18

Amados no sabemos que nos hubiera pasado si hemos seguido conduciendo por ese camino. Dios posblemente nos ha librado de algún mal.

Nos dice la Palabra: 10 No te sobrevendrá mal, Ni plaga tocará tu morada. 11 Pues que á sus ángeles mandará acerca de ti, Que te guarden en todos tus caminos. Salmo 91: 10 - 11

Acuerdese que el enemigo como leon rugiente anda alrededor buscando a quein devorar.

Amados dejemos de quejarnos por todo lo que nos pasa en la vida. Aprendamos a dar a Dios gracias en todo para así recibir la bendición de Dios.